
Una de las cosas que más me ha impulsado a seguir en este ministerio, es el haber encontrado a través de toda la Biblia, la inmensa preocupación de Dios para con los Levitas. Me impresiona el saber que Él fue quien dispuso que los Levitas no trabajasen o no se dedicasen a ninguna otra cosa que no sea este su ministerio, obviamente tenía su razón de ser, es claro que Dios no hace nada sin considerarlo previamente, Él sabía que para esta función se requiere tiempo, y no hay tiempo para otros menesteres, no hay tiempo para incursionar en otras áreas, si un Levita de este tiempo ha sentido en su corazón el llamado a este servicio, de seguro su fidelidad y lealtad lo mantendrá siempre en la brecha, de seguro no desistirá, de seguro cumplirá, a pesar de las circunstancias, a pesar de su entorno, a pesar de sí mismo: es Dios quien le ha llamado.
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